Aquí, en el Barrio Financiero está Wall Street, la Bolsa de Nueva York, la Reserva Federal y las sedes de muchas de las instituciones financieras más importantes del mundo. Y, por supuesto, el barrio está repleto de ejecutivos siempre atareados y con mucha, mucha prisa. Aún así, existen pequeñas callejuelas en las que uno puede refugiarse y, por un momento, evadirse de este ritmo frenético tan típico neoyorquino, a menudo ironizado y parodiado en las series de televisión y en la gran pantalla.
De entre todas estas callejuelas, hay muchas por las que recomendarte pasear pero, sin ninguna duda, la Stone Street es la preferida por los propios ejecutivos para echar el freno de vez en cuando, para comer e incluso para tomarse una copa tras la jornada laboral.
Además, esta calle da nombre a toda una zona del Barrio Financiero, llamado Barrio Histórico de Stone Street, formado básicamente por esta calle además Pearl Street, South William Street y Coenties Alley. De hecho, para acabar de comprender este mini barrio histórico dentro del Distrito Financiero, has de saber que antiguamente Stone Street discurría desde Broadway hasta Hanover Square, pero fue dividida en dos en los años 80 a raíz de la construcción de un gran edificio de Goldman Sachs, uno de los grupos de banca de inversión y valores más grandes del mundo.
De las dos partes que han quedado de Stone Street, la más entrañable es la de más al este, junto a Hanover Square, donde es peatonal y siempre está animada. En verano, se llena de terracitas de diferentes restaurantes y cafés y, aunque en invierno no verás tantas mesas y sillas desplegadas, el interior de los locales siempre está animado.
Pero Stone Street no siempre fue Stone Street. Muy en los inicios de la propia historia de la ciudad hacia el año 1640, esta calle era conocida como High Street. Luego, hacia 1655 se unió a Brewers Street y, como los residentes se quejaron por las condiciones de la zona, se decidió pavimentar en 1658. De hecho, hay documentos que aseguran que esta fue la primer calle adoquinada de la Nueva Ámsterdam, renombrada Nueva York a partir de 1667. Poco después, tras el dominio británico la calle pasó a ser Duke Street y finalmente fueron los propios neoyorquinos quienes decidieron darle el nombre de Stone Street a partir de 1794. Después sucedió el Gran Incendio de 1835 y destrozó gran parte de la zona, que fue reconstruida con almacenes para los mercaderes, tiendas y demás locales, debido a su proximidad a la zona portuaria. El resto del siglo XIX y principios del XX, fue un área nada popular pero gracias a la familia Eno, conocidos por su negocio inmobiliario en Manhattan, se consiguió reconstruirla y remodelarla manteniendo un estilo arquitectónico neerlandés llenándola, además, de locales de ocio, ideales para un alto en el camino si estás de turismo por el Barrio Financiero de Nueva York.
